Prostatitis: tratamiento y prevención

tratamiento de la prostatitis por un médico

La prostatitis es una lesión inflamatoria de la glándula prostática en los hombres que deteriora significativamente la calidad de vida.

Las razones del desarrollo de la prostatitis.

Existen los siguientes factores de riesgo:

  • infecciones del tracto genital;
  • inmunidad debilitada;
  • malos hábitos;
  • vida sexual irregular;
  • hipotermia del cuerpo;
  • estilo de vida sedentario.

Estos factores contribuyen a la intensificación de procesos inflamatorios lentos en la glándula prostática (prostatitis). Es más fácil ayudar a un paciente en las primeras etapas del proceso inflamatorio que esperar la manifestación clínica de la enfermedad en forma de diversas alteraciones en la micción, disminución de la calidad de vida sexual o dificultades en la procreación.

Los síntomas de la prostatitis.

La ausencia de quejas en la mayoría de los pacientes en las primeras etapas del proceso inflamatorio en la próstata (glándula prostática) se debe a la pequeña cantidad de receptores del dolor en el propio órgano.

Naturalmente, debe consultar a un urólogo cuando esté preocupado por:

  • sensaciones dolorosas en el perineo, en la parte inferior del abdomen;
  • picazón en la uretra;
  • la calidad de la vida sexual disminuye;
  • aparece micción frecuente (no siempre dolorosa);
  • tener que ir al baño por la noche;
  • una pareja sexual no puede quedar embarazada.

Además, es posible que tenga fiebre, debilidad y la aparición de nerviosismo (incluidos los provocados por los miedos).

No debe posponer el inicio del tratamiento cuando aparezcan síntomas (quejas), que pueden disminuir por un tiempo, pero progresarán sin asistencia médica.

Tratamiento integral de la prostatitis.

Para un tratamiento eficaz, debe consultar a su médico. El diagnóstico se basa en quejas, datos de exámenes y resultados de pruebas. Un examen de alta calidad garantiza el éxito en el diagnóstico (con la identificación de sus causas) y el tratamiento posterior. El examen necesario se puede realizar en una clínica especializada. Si ya tiene los resultados de las pruebas de laboratorio, los resultados de la ecografía en sus manos, entonces los médicos de la clínica recomiendan llevarlos a su cita. Esto le ayudará a ahorrar su presupuesto familiar y acortar el tiempo del examen.

En la terapia compleja de la prostatitis, los médicos de la clínica utilizan medicamentos modernos altamente efectivos, procedimientos terapéuticos, terapia de ejercicios y recomendaciones nutricionales. Todo esto le permite eliminar tanto las causas como las consecuencias de la enfermedad. Lo que conduce a la recuperación más rápida posible de la salud del paciente.

Tratamiento de la prostatitis aguda

La base del tratamiento es la terapia con antibióticos, adaptada individualmente a un paciente específico en un caso específico. Como fármacos auxiliares, se utilizan fármacos antiinflamatorios y antipiréticos. Se recomienda beber muchos líquidos y reposo en cama. Si es imposible orinar, se coloca un catéter que extrae la orina. Si se desarrolla un absceso, el paciente experimenta una apertura transuretral o transabdominal del foco purulento.

Con una etapa grave de prostatitis, es necesario un tratamiento urgente en un hospital.

Tratamiento eficaz de la prostatitis crónica.

El efecto complejo sobre la glándula prostática trae buenos resultados:

  1. La terapia antibacteriana, antiviral y antifúngica se selecciona individualmente según los resultados de las pruebas de laboratorio y la etapa de la enfermedad.
  2. Terapia antiinflamatoria.
  3. Preparaciones que restauran la inmunidad debilitada.
  4. El masaje de la glándula prostática restaura la estructura y función del órgano y mejora el suministro de sustancias medicinales.
  5. La terapia con ejercicios aumenta la efectividad de los tres puntos anteriores.
  6. Recomendaciones nutricionales.

Prevención de la prostatitis

La prevención primaria implica la prevención de la enfermedad como tal en una persona sana.

  1. Lucha contra un estilo de vida sedentario. Incluyendo terapia de ejercicio.
  2. La nutrición más completa con el uso obligatorio de complejos de vitaminas y minerales (oligoelementos).
  3. Si no tiene una pareja sexual permanente, entonces el uso obligatorio de un condón en la actividad sexual. Y el rechazo al sexo oral (en la boca viven todos los mismos microbios que en el aparato genitourinario).
  4. Si tienes una pareja sexual habitual, cuando aparecen infecciones del aparato genitourinario (y esto puede ser una complicación después de resfriados, intoxicaciones alimentarias y falta de higiene), el tratamiento sincrónico es obligatorio día tras día y con los mismos fármacos.
  5. Si usted y su pareja practican sexo anal, es imperativo usar condón cada vez.
  6. Trate de no tener falta de sueño siempre que sea posible. Contrarrestar el estrés crónico (hay muchos libros escritos sobre este tema con resultados). Tiene sentido que los atletas controlen el sobreentrenamiento siempre que sea posible. Y trate de evitar la hipotermia frecuente (experimente con la ropa), que socava la resistencia del cuerpo en su conjunto.
  7. Si su deseo sexual disminuye, consulte a su urólogo para mantener una vida sexual regular.

La prevención secundaria implica la prevención de exacerbaciones y recaídas de una enfermedad existente.

Además de las recomendaciones anteriores, se recomienda agregar lo siguiente:

  1. Para ser examinado por un urólogo en busca de infecciones ocultas.
  2. Use medicamentos que mejoren la estructura y función de la glándula prostática.
  3. Tratamiento de cualquier foco de infección, incluidas sinusitis y caries.
  4. Limite el consumo de alcohol si es posible.
  5. La comida debe contener una cantidad suficiente de fibra dietética: verduras, frutas, hierbas, cereales integrales y siempre salvado.
  6. Tratamiento de enfermedades concomitantes que reducen la efectividad de la terapia. Los más frecuentes y significativos son la diabetes mellitus, los trastornos vasculares, el síndrome metabólico, la deficiencia hormonal (incluida la principal hormona masculina, la testosterona).